
Una familia de Houston está causando polémica luego de que instalara decoraciones de Halloween con un tema migratorio, cerca del centro de la ciudad.
Las decoraciones consisten en tres maniquíes: dos de ellos vestidos como simpatizantes de MAGA, con una gorra roja, colgados de una horca; y uno más de pie, junto a ellos, vestido con un poncho mexicano y un sombrero de paja, asemejando ser un inmigrante. Mark Antonio Rodríguez, dueño de la vivienda y quien instaló las decoraciones, y dijo que no está cometiendo delito alguno y que las decoraciones sólo reflejan lo que siente.
“Tengo el First Ammendment Right, donde yo puedo expresar cómo me siento mientras que yo no ande amenazando a nadie. E igual, hablé con un abogado y lo que tengo ahí no está nada contra la ley”, dijo Rodríguez al comenzar la entrevista.
“Mi comunidad vive con miedo de que la vayan a estar levantando y no tengo nada contra ICE o contra Migración, pero es como me siento ahorita. Yo quería adornar así en mi casa y en mi yarda mostrando eso… No está bien lo que está haciendo Migración orita con toda mi gente, levantando de la Corte, van a los construction sites a buscar gente, van a los restaurantes a levantar gente, eso está mal, lo andan parando en la calle y eso sí está mal porque mi comunidad está viviendo con miedo”, agregó.
Al cuestionarle el significado de su instalación, Rodríguez contestó: “Si una gente mira una cruz, ellos lo pueden pensar de Dios o de la Muerte, es como uno lo quiera tomar… y por nada ando amenazando a nadie, yo nomás quería colgar esto porque antes esto era México y yo soy mexican american, yo nací aquí, pero mis raices vienen de México, mis papás, y yo tengo mi derecho como ciudadano de Estados Unidos.
“Varia gente se ha parado y les da gusto. Es enseñar cómo me siento: La bandera mexicana, pues soy mexicano; ahí tengo el señor con el poncho, la gente con las mascarillas y con las cachuchas rojas, es una muestra de cómo me siento porque mi comunidad está viviendo con miedo”, puntualizó.
Rodríguez dijo que aunque tenía algunos años sin hacerlo, ya había instalado decoraciones de este tipo en celebraciones previas de Halloween y que sólo ha recibido reacciones positivas.
“Bastante gente ha venido aquí, todos mis vecinos querían tomar fotos. Hace rato un señor con sus niñas querían bajarse a tomarse foto ahí y yo no hablo nada mal, ni una vibra mal», aseguró.
La inusual instalación de Halloween llamó la atención en redes sociales, donde las opiniones son diversas.
Aunque unos aseguran que debe amonestarse a la familia o incluso llevarlos a prisión, otros recuerdan que existe el derecho a la libertad de expresión y que la instalación debe quedarse.
Finalmente, Rodríguez dijo que con la instalación buscaba enviar un mensaje.
“Ojalá que el gobierno o el presidente agarren la onda porque están arruinando la comunidad: los restaurantes están vacíos, los construction sites están vacíos, gente no quiere trabajar por miedo, gente no quiere llevar a los niños a la escuela por miedo de que los vaya a detener ICE, hasta cuando los para la Policía, la gente tiene miedo, se mira solo todo”, dijo Rodríguez.