
Con el objetivo de mejorar la calidad de vida de Bruce Willis en el tratamiento de su demencia frontotemporal, el actor ya no reside con su familia.
La vida de Bruce Willis y de su familia dio un vuelco en 2022, cuando se anunció que el actor de películas icónicas como El sexto sentido o Jungla de cristal, padecía afasia. Pero ese diagnóstico resultó ser solo un síntoma de algo más complicado. Un año más tarde, se comunicó que el diagnóstico final era demencia frontotemporal.
Desde que se anunció la retirada de Bruce Willis de la vida pública y, por consiguiente, de su carrera, la familia del actor se ha volcado en cuidar de él, empezando por su actual esposa, la actriz Emma Heming, y su exmujer, la también actriz Demi Moore.
En este tiempo, hemos visto actualizaciones del estado de salud de Bruce Willis por parte de su familia, especialmente de Emma Heming Willis. También hemos tenido vistazos a algunos momentos íntimos, como sus cumpleaños o la celebración familiar del Globo de Oro de Demi Moore por La sustancia.
Hemos visto la dedicación constante de Emma Heming por el bienestar de su esposo y, además, por visibilizar y concienciar sobre la demencia frontotemporal (FTD), intentando que la complicada situación de su marido sirva para ayudar a otros.
Bruce Willis se muda para que todos, incluido él, mejoren su calidad de vida
Heming ha participado recientemente en un especial de la ABC titulado Emma & Bruce Willis: The Unexpected Journey. Allí, la actriz y empresaria ha explicado que Bruce ya no vive en la casa familiar como parte de su tratamiento para ralentizar el progreso de la demencia.
En su lugar, el actor reside en una casa individual cercana de una sola planta, con cuidados las 24 horas del día. Con esta decisión, tanto Bruce Willis como su propia familia esperan ganar en calidad de vida, tal y como relata Heming, quien no niega que «ha sido una decisión muy difícil«:
«Sabía, ante todo, que Bruce querría eso para nuestras hijas. Querría que estuvieran en un hogar más adaptado a sus necesidades, no a las suyas«.
La actriz destaca que sus hijas pequeñas, de 13 y 11 años, han tenido que adaptarse a las necesidades de su padre, y que ella misma se ha obsesionado tanto que ha olvidado que, a fin de cuentas, siguen siendo niñas. Estos años, se las ha privado de vida social en casa para evitar alboroto que agitase a Bruce Willis: sin visitas de amigos ni similares.
«No sabía si los padres se sentirían cómodos dejando a su hija en casa, así que, una vez más, no solo me aislé, sino que aislé a toda la familia. Sabes, las niñas también estaban aisladas, y eso fue a propósito; yo lo provoqué. Fue una época realmente difícil«.
Bruce Willis puede no vivir bajo el mismo techo que su familia, pero Heming señala que lo visitan a diario, «especialmente para desayunar y cenar«, por lo que el contacto con él no ha desaparecido de ningún modo.