
La Organización Mundial de la Salud ha reemplazado el término de ‘transexual’ por el de ‘incongruencia de género’, definido como condición relacionada con la salud sexual de una persona, en lugar de como un trastorno mental y de comportamiento
En 1990 la Asamblea Mundial de la Salud dejó de definir la homosexualidad como un trastorno mental y publicó la primera DCI, una guía utilizada en todo el mundo como base para realizar las estadísticas de salud que influyen en la financiación de los servicios sanitarios y seguros de salud.
Ahora, y con motivo de la celebración del Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, la OMS ha anunciado la actualización del trabajo, conocido también como ‘DCI-11’, en la que se recuerda que el término de ‘transexual’, aludiendo a las personas trans y homosexuales, generaba estigmas y creaba barreras en la atención sanitaria.
Y es que, por ejemplo, estas personas tenían que ser diagnosticadas como enfermos mentales para poder acceder a una atención médica. Ahora, la guía reconoce los vínculos que ocurren con frecuencia entre la identidad de género, el comportamiento sexual, la exposición a la violencia y las infecciones de transmisión sexual.
El director interino de Enfermedades Transmisibles en la región europea de la OMS, Masoud Dara, destacó la importancia de que las personas transgénero tengan el mismo acceso a los servicios de salud, incluida la prevención y atención del VIH.
«La adopción de la ‘CIE-11’ por los países es un primer paso vital para eliminar las barreras legales a la atención. Eso ayudará a detener el estigma y la discriminación y acelerará el progreso hacia una verdadera cobertura de salud universal», expresó Dara.