Abrazar a su hijo o hija y decirle que su amor es incondicional es la mejor acción y las mejores palabras que se pueden expresar al descubrir que su hijo o hija es homosexual. Esto fue dicho por Kathy Godwin, vicepresidenta de la junta directiva de la organización PFLAG. Esta organización apoya a la
comunidad LGBTQ+ y ayuda a educar a los padres, familias y amigos de los miembros de esta comunidad.
La misión de PFLAG es construir sobre una base de familias amorosas unidas con personas LGBTQ+ y aliados que se apoyan mutuamente, y educarnos a nosotros mismos y a nuestras comunidades para que
se expresen como defensores hasta que todos los corazones y mentes respeten, valoren y afirmen a las personas LGBTQ.
Ese tipo de aceptación y apoyo de la familia es determinante al momento de enfrentar cualquiera de los factores de riesgo en los que las personas que se identifican como LGBTQ+ se enfrentan una vez deciden
presentarse ante la sociedad como miembros de este colectivo.
La adolescencia es cuando los jóvenes descubren su identidad sexual. En algunos casos el niño se identifica como homosexual y esto puede generar una serie de angustias o dificultades tanto para el joven como para quien está alrededor. La homosexualidad es la orientación sexual que manifiesta una interacción y atracción física y emocional hacia individuos del mismo sexo. Este descubrimiento no sólo es importante para el niño o adolescente, también lo es para los padres pues descubren que tienen un
hijo gay o una hija lesbiana. Ante esta situación surgen innumerables preguntas cuyas respuestas varían en función de diferentes aspectos como las creencias religiosas, ideales fuertemente arraigados sobre la familia tradicional o, quizá, el miedo a lo que les pueda pasar en la escuela.
Los factores de riesgo pueden incluir depresión, suicidio, abuso de sustancias y conductas sexuales de riesgo. La investigación del Proyecto de Aceptación Familiar (The Family Acceptance Project®) muestra que la edad promedio en la que los niños y niñas se dan cuenta de que son homosexuales es alrededor de 13 años. Godwin de PFLAG dice que es más fácil para los adolescentes y los niños más pequeños salir del closet hoy que en el pasado.
Este proyecto es una iniciativa de la Universidad Estatal de San Francisco (SFSU) para prevenir riesgos de la salud de las personas LGBT a través del contexto de sus familias.
Esta iniciativa investiga, interviene, educa, y promueve el establecimiento de política que trabajen para prevenir los riesgos de salud física y mental para los niños, niñas y jóvenes homosexuales, bisexuales y transgénero (LGBTQ+), incluyendo el suicidio, la falta de vivienda y el VIH, en el contexto de sus familias, culturas y comunidades de fe.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) mencionan en su sitio del internet que los jóvenes homosexuales y bisexuales y otras minorías sexuales son más
propensos a ser rechazados por sus familias. Esto aumenta la posibilidad de que se queden sin hogar.
Alrededor del 40% de los jóvenes sin hogar son LGBTQ+. Un estudio publicado en 2009 comparó a jóvenes adultos homosexuales, lesbianas y bisexuales que experimentaron un fuerte rechazo de sus familias con sus compañeros que tenían familias más solidarias. Los investigadores encontraron que aquellos que experimentaron un rechazo más fuerte se trataba de: 8 veces más probabilidades de haber intentado suicidarse, 6 veces más probabilidades de reportar altos niveles de depresión, 3 veces más propensos a usar drogas ilegales y 3 veces más probabilidades de tener relaciones sexuales riesgosas.
Los padres deben hablar abiertamente con sus hijos adolescentes sobre cualquier problema o preocupación y estar atentos a los comportamientos que podrían mostrar que su hijo o hija está siendo acosado o está experimentando violencia.
Si se sospecha de acoso escolar, violencia o depresión, los padres deben tomar medidas inmediatas trabajando con el personal de la escuela y otros adultos de la comunidad. Además, los padres que hablan y escuchan a sus adolescentes de una manera que invita a discutir abiertamente sobre la
orientación sexual pueden ayudar a sus adolescentes a sentirse amados y apoyados. Es necesario que tengan conversaciones honestas sobre el sexo seguro, las enfermedades de transmisión sexual y la prevención del VIH (El virus que causa el SIDA). También deben hablar sobre cómo evitar conductas riesgosas y situaciones inseguras o de alto riesgo.
Los hombres en los Estados Unidos son más propensos a quitarse la vida casi cuatro veces la tasa de mujeres y representan el 79% de todos los suicidios en Estados Unidos. El suicidio es la séptima causa de muerte de los varones en los Estados Unidos. Los hombres homosexuales, bisexuales y otros hombres que tienen relaciones sexuales con hombres corren un riesgo aún mayor de sufrir intentos de suicidio, especialmente antes de los 25 años. Un estudio de jóvenes en los grados 7-12 encontró que los jóvenes
homosexuales y bisexuales tenían más del doble de probabilidades de haber intentado suicidarse que sus pares heterosexuales.
Según datos de Encuestas de Comportamiento de Riesgo Juvenil (YRBS) del CDC realizadas durante 2001-2009 en siete estados y seis grandes distritos escolares urbanos, entre el 19% y el 29% de los estudiantes homosexuales en todos los sitios y entre el 18% y el 28% de los estudiantes bisexuales en los sitios experimentaron violencia en el año anterior.
El Centro Nacional de Ayuda para Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales (LGBTQ+) desde 1996 proporciona apoyo, conexiones comunitarias e información de recursos a personas con preguntas sobre
orientación y/o identidad de género. Utilizan un grupo diverso de voluntarios LGBTQ+, y funciona tres líneas directas nacionales: la Línea Nacional LGBTQ+ (LGBTQ+ National Hotline): 1-888-843-4564, la línea
de conversación nacional de la juventud LGBTQ+ (LGBTQ+ National Youth Talkline): 1-800-246-7743 y la Línea directa nacional de la tercera edad LGBTQ+ (LGBTQ+ National Senior Hotline): 1-888-234-7243 así como el chat en línea privada y voluntarios que conversan uno a uno con los que llaman a pedir ayuda y que ayuda tanto a los jóvenes como a los adultos con problemas de salir del closet, información de sexo
seguro, acoso escolar, preocupaciones familiares, problemas de relación y mucho más.
Por: Emilio Apontesierra-Paretti, M.Ed Guidance Counselor.